Son muchas las comunidades
eclesiales puestas bajo el patrocinio del divino Salvador, y hoy es su día: la
fiesta de la Transfiguración del Señor.
Fíjate en Jesús mientras lleva a
sus discípulos “a una montaña alta”:
él está llegando al fin del camino por donde
baja hasta la muerte, y una muerte de cruz. Él, “un hijo de hombre”, está bajando a su infierno. ¡Él es el hombre!
Fíjate en Jesús, fíjate en el
hombre, y que nadie separe de Jesús al hombre, que nadie separe lo que Dios ha
unido.
De Jesús lo dice la Sublime
Gloria que le trajo aquella voz: «Éste es
mi Hijo amado, mi predilecto». Y la fe lo entiende del hombre, sobre todo
del que pudiera parecer más olvidado, menos hijo, menos de Dios: «Éste es mi Hijo amado, mi predilecto».
Es a ese hombre, al bebé que esta
mañana nació muerto para desolación de su madre y de su padre, al adulto que encuentras horadando la basura
en busca de algo que cambiar por pan, al joven que encerraron sin papeles en un
espacio que no mira al futuro, al marginado a quien nada se le debe porque nada
produce, al que trabaja horas interminables por un salario que no da para matar
el hambre, al lázaro que los perros lamen en la soledad de nuestros portales,
es a ese hombre al que la fe ve transfigurado: resplandeciente más que el sol,
limpio más que la luz, amado como hijo predilecto, en Cristo Jesús muerto y
resucitado.
La liturgia nos recuerda que la
claridad de la transfiguración brillará un día en todo el cuerpo de Cristo. Y
yo necesito recordar que esa luz, aunque no la veamos, está ya encendida en el
cuerpo de Cristo que son los pobres
A ellos, a los sin nombre, a los
sin papeles, a los sepultados en el mar del olvido, a los reducidos a cifra en
una lápida o en una página de periódico, a ellos de manera del todo particular
se refiere el canto de nuestra comunión: “Cuando Cristo se manifieste, seremos
semejantes a él, porque le veremos tal cual es”.
Y mientras llega el día de la
luminosa manifestación de Cristo, vivamos esperanzados la oscuridad de la
comunión con Cristo.
Feliz domingo.
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